Una de las iniciativas hemisféricas más audaces en materia de provisión de recursos humanos en salud está a punto de finalizar, repercutiendo negativamente sobre la atención de salud de una enorme población vulnerable en Brasil.
Introducción
Una de las iniciativas hemisféricas más audaces en materia de provisión de recursos humanos en salud está a punto de finalizar, repercutiendo negativamente sobre la atención de salud de una enorme población vulnerable en Brasil. La postura negativa del ultraderechista presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, respecto del Programa Más Médicos, sumada a su posición hostil hacia el Gobierno de Cuba, han provocado la reacción cubana de suspender su participación en dicho Programa y retirar al contingente médico cubano de dicho país.
Antecedentes
Es importante recordar que el Programa Más Médicos se inició en agosto de 2013 por iniciativa de la presidenta Dilma Rousseff, para resolver la crónica falta de atención de salud de una importante población vulnerable en un número significativo de municipios del Brasil. La concreción de los arreglos en torno a una cooperación triangular hizo que el gobierno de Cuba facilitara la participación de aproximadamente 8,000 médicos cubanos, repartidos en 2,885 ciudades donde los médicos brasileños no aceptaban trabajar. El Programa se desarrolló exitosamente a lo largo de los 5 años, ampliando sus plazas para profesionales de la salud a 18,240 en 8,400 municipios al 2018, incorporando además de profesionales cubanos a profesionales de otros países.[1]
La cooperación triangular se realizó a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que estableció las bases para la realización de convenios con el Ministerio de Salud de Brasil y con el Ministerio de Salud Pública de Cuba.
Resultados de la presencia cubana dentro del Programa
Datos oficiales señalan que, “en estos cinco años de trabajo, cerca de 20 mil colaboradores cubanos atendieron a 113 millones 359 mil pacientes, en más de 3 mil 600 municipios, llegando a cubrirse por ellos un universo de hasta 60 millones de brasileños en el momento en que constituían el 80 por ciento de todos los médicos participantes en el programa. Más de 700 municipios tuvieron un médico por primera vez en la historia.”
La experiencia de este Programa y sus importantes resultados sanitarios en un período corto, demuestran el potencial de la cooperación Sur-Sur y el rol de los organismos de cooperación multilateral como el realizado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Tanto el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) como la Organización Mundial de la Salud(OMS) calificaron a este Programa como un excelente ejemplo de buenas prácticas en cooperación triangular y un avance en la implementación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.[2]
El importante impacto social generado por este Programa se vio asimismo expresado en la percepción y buena aceptación por parte de las autoridades y de la población en los ámbitos donde tuvo desarrollo. “La labor de los médicos cubanos en lugares de pobreza extrema, en favelas de Río de Janeiro, Sao Paulo, Salvador de Bahía, en los 34 Distritos Especiales Indígenas, sobre todo en la Amazonía, fue ampliamente reconocida por los gobiernos federal, estaduales y municipales de ese país y por su población, que le otorgó un 95 por ciento de aceptación, según estudio encargado por el Ministerio de Salud de Brasil a la Universidad Federal de Minas Gerais.”[3]
Decisión del Ministerio de Salud Pública de Cuba
El 14 de noviembre, el Ministerio de Salud Pública de Cuba decidió la no continuación de su participación en el Programa Más Médicos en Brasil, debido a las críticas y provocaciones del presidente electo brasileño Jair Bolsonaro, quien adelantó opinión respecto de la necesidad de llevar a cabo importantes modificaciones a las condiciones de dicha cooperación, alterando sustancialmente los convenios suscritos.
La decisión oficial cubana habría sido comunicada a la Directora de la OPS, Dra. Carissa Etienne y a las actuales autoridades brasileñas.[4] Esto implicará la retirada de más de 8,000 médicos cubanos que trabajan dentro del Programa, antes de fin de año.
Las primeras reacciones en Brasil
En señal de protesta y de denuncia frente a esta situación, tanto el Consejo Nacional de Secretarias Municipales de Salud (CONASEMS) como el Frente Nacional de Alcaldes (FNP) hicieron pública su decepción por la interrupción de la cooperación técnica entre la OPS y el gobierno de Cuba, que posibilitaba el trabajo de los médicos cubanos en el Programa Más Médicos. Precisaban en un comunicado que “Con la decisión del Ministerio de Salud de Cuba, anunciada este miércoles, de rescindir la asociación, más de 29 millones de brasileños serán desatendidos.”[5]
Para complicar aún más la situación, el presidente electo Jair Bolsonaro señaló ayer 15 de noviembre que “su Gobierno ofrecerá asilo político a los miles de médicos cubanos que no deseen regresar a su país tras la decisión del Gobierno de Cuba de suspender su participación en el programa Más Médicos.”[6]
Conclusiones
Dado el déficit crónico y estructural de profesionales médicos en Brasil, es muy probable que producto de la falta de atención de salud, se produzca un retroceso en el estado de salud de la población que era atendida por el Programa Más Médicos. Del mismo modo, es muy probable que el país no pueda cumplir con los compromisos internacionales en materia de salud, particularmente con aquellos vinculados al ODS 3 de la Agenda 2030 y la Agenda de Salud Sostenible para las Américas 2018-2030.
No se es inteligente ni es una señal positiva de lo que será un buen gobierno, cuando se anteponen los intereses ideológicos de los gobernantes a las justas aspiraciones de salud y bienestar de sus poblaciones.